CAYEY ANTI-CRIMEN  es una iniciativa que busca abordar el desafío de la delincuencia y la violencia en Cayey PR. El costo humano y económico de la criminalidad es significativo: afecta vidas, el bienestar de las personas y obstaculiza el desarrollo económico.

En este campo, las fuerzas policiales desempeñan un papel fundamental en la prevención del delito y la mejora de la seguridad ciudadana. Sin embargo, la confianza en la policía en muchos países de América Latina es baja. Según datos del Latinobarómetro, en la mayoría de estos países, menos de la mitad de la población confía en la policía nacional. En algunos casos, menos de uno de cada tres individuos confía en esta institución.

La falta de confianza en la policía tiene consecuencias importantes. Por ejemplo, afecta la disposición de los ciudadanos a financiar a la policía y la demanda de políticas de seguridad.  

Para mejorar la seguridad en la región, es crucial trabajar en aumentar la confianza en las fuerzas policiales. Esto incluye fomentar la colaboración entre la ciudadanía y la policía, así como garantizar que los recursos destinados a la seguridad se utilicen de manera efectiva. En última instancia, la confianza en la policía es un elemento clave para reducir el delito y promover un entorno más seguro para todos.

Hay indicios claros de que las estrategias de prevención del delito bien planificadas no solo previenen el delito y la victimización, sino que también promueven la seguridad de la comunidad y contribuyen al desarrollo sostenible¹. A continuación, presento algunas políticas y enfoques efectivos para reducir el delito:

1. Prevención Social del Delito:

   • Esta estrategia engloba medidas para reducir el riesgo de que se produzcan delitos y sus efectos perjudiciales. Incluye intervenciones para influir en las causas múltiples del crimen, como la pobreza, la educación, el empleo y la cohesión social.

2. Fortalecimiento de la Confianza en la Policía:

   • La falta de confianza en la policía puede reducir la efectividad de las políticas para reducir el delito y la violencia. Trabajar en aumentar esta confianza es fundamental para mejorar la seguridad en nuestra región.

3. Enfoque Basado en el Conocimiento:

   • Fundamentado en la prevención proactiva y eficaz, este enfoque se basa en un conocimiento amplio e inclusivo. Comprende la identificación de factores de riesgo y la implementación de estrategias basadas en evidencia.

4. Coordinación Multisectorial:

   • La colaboración entre diferentes sectores (gobierno, sociedad civil, academia, etc.) es crucial para abordar las causas subyacentes del crimen y diseñar políticas integrales.

5. Educación Pública y Medios de Comunicación:

   • La sensibilización y la educación sobre la prevención del delito pueden influir en el comportamiento de la comunidad y promover una cultura de seguridad.

6. Sostenibilidad y Rendición de Cuentas:

   • Las políticas deben ser sostenibles a largo plazo y estar sujetas a evaluación y rendición de cuentas para garantizar su efectividad continua.

En resumen, la prevención del delito requiere un enfoque integral que involucre a múltiples actores y se base en evidencia sólida. La confianza en la policía y la colaboración entre la ciudadanía y las autoridades son fundamentales para lograr una sociedad más segura.